Ribadelago

Ribadelago, cuyo nombre proviene de los términos “riba” y “lago”, haciendo referencia a su ubicación en la parte alta del lago, es un pueblo con una historia fascinante. Fundado alrededor del año 920 por frailes de la Orden del Abad Juan, quienes llegaron huyendo del Califato cordobés, Ribadelago se estableció en la parte superior de la ribera del Lago de Sanabria. Este asentamiento medieval, bajo el reinado de Ordoño II de León, se pobló con colonos que acompañaron a los frailes desde tierras andalusíes.

En la Edad Moderna, Ribadelago formó parte de las Tierras del Conde de Benavente, y tras la reestructuración provincial de 1833, se integró en la provincia de Zamora, dentro de la Región Leonesa. En 1850, el municipio de Ribadelago se unió al de Galende, consolidando su identidad regional.

Inspiración Literaria y Leyendas

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El pintoresco paisaje y la rica historia de Ribadelago inspiraron a Miguel de Unamuno para escribir su novela “San Manuel Bueno, mártir”. Además, el pueblo es una de las fuentes de la leyenda del Lago de Sanabria, que relata la misteriosa desaparición del pueblo de Villaverde de Lucerna bajo las aguas del lago, una historia que ha perdurado en la tradición oral.

Tragedia y Resiliencia

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El 9 de enero de 1959, Ribadelago sufrió una devastadora tragedia cuando la rotura de la presa de Vega de Tera liberó unos 8 millones de metros cúbicos de agua, arrasando el pueblo y causando una de las mayores catástrofes de la historia reciente de España. A pesar de este evento, Ribadelago ha resurgido y se mantiene como un testimonio de la resiliencia y la fortaleza de sus habitantes.

Visita Ribadelago

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Hoy, Ribadelago es un destino turístico que combina historia, naturaleza y cultura. Los visitantes pueden explorar sus paisajes impresionantes, aprender sobre su historia única y disfrutar de la tranquilidad del Lago de Sanabria. Es un lugar perfecto para aquellos que buscan una conexión profunda con la historia y la naturaleza en la región de Sanabria.